El rol de los voluntarios adultos como educadores scouts

En los posteos previos venimos tratando algunos elementos del Método Scout que hacen única y particular a la propuesta del Movimiento Scout.

Llegamos a este punto y consideramos necesario explayarnos un poco más sobre el rol de los voluntarios adultos como educadores scouts.

Ante todo, al comenzar a tratar este elemento del Método Scout, debemos comprenderlo como parte indisoluble de una inter-relación entre lo que llamamos sistema de patrullas, organismos de rama y guía y acompañamiento de los adultos al protagonismo de los jóvenes.

Por eso es útil repasar la definición completa de todo lo que comprende el elemento que algunos apenas resumen como “pertenencia a pequeños grupos”:

“Pertenencia a pequeños grupos (por ejemplo la patrulla), involucrando, bajo la guía y acompañamiento de adultos, el descubrimiento y la aceptación progresiva de responsabilidades y la preparación hacia el auto-gobierno tendiente al desarrollo del carácter y la adquisición de habilidades, auto-estima, confiabilidad y capacidad para cooperar con los otros y liderar.”

Habiendo analizado bastante (aunque nunca es suficiente) la pertenencia a pequeños grupos, el sistema de patrullas y los organismos de gobierno de la rama, vamos ahora a dedicarle un poco de atención al concepto de guía y acompañamiento de los adultos.

Como primer paso es bueno explicitar que aunque Baden-Powell propone la auto-educación, el proceso pedagógico que propone el Movimiento Scout sólo es posible en la medida en que existan adultos responsables de su puesta en práctica, sea cual fuere el grupo de edad. Es decir, la guía y acompañamiento de los adultos es necesaria aún en la rama Rovers.

De lo que previamente desarrollamos rescatamos que:

  • El educador scout participa activamente de ese proceso compartiendo las actividades con los jóvenes y generando espacios que permitan vivenciar los valores que propone el Movimiento Scout.
  • El adulto ayuda al grupo a descubrir el sentido de lo vivido, presta atención a cada joven y lo estimula en su desarrollo personal.
  • El rol del adulto es fomentar la toma de decisiones por parte de los jóvenes sin tratar de imponer sus propias convicciones.

Pero el que mejor lo resume es el propio Baden-Powell en su libro “Aids to Scout Mastership” (que nosotros conocemos como “Guía para el Jefe de Tropa”, aunque no es solamente para “Tropa” y bien podríamos decir que son “Orientaciones para los educadores scouts”).
Como veremos a partir de la semana próxima:

  • En primer lugar, los consejos y orientaciones de la Guía es para todo voluntario scout, no solamente para el “Jefe de Tropa” y,
  • En segundo lugar, el concepto de “hombre – muchacho” nos servirá de puntapié inicial en la reflexión sobre el rol del adulto en el Movimiento Scout.

Siempre listo, rodrigo
Rodrigo González Cao

(Disclaimer: los artículos publicados son escritos a partir de la experiencia scout del autor y, al menos conscientemente, no encontrarás juicios de valor o sentencias que pontifiquen a unos y descalifiquen a otros. La intención al compartirlos es que puedan ser interpretados por cada uno de forma personal y adaptados a la realidad y contexto de cada lector según su propia experiencia y la situación particular de la asociación scout en la cual participa).
Más material sobre el Programa de Jóvenes en el Movimiento Scout:
También en:

Comentarios