La participación democrática y republicana de los jóvenes comienza en los organismos de rama del Movimiento Scout

En los posteos previos mencionamos que las patrullas y los pequeños grupos en general son la base de la estructura de cada rama y que la sección es el espacio de encuentro adonde se resuelven los conflictos. 
En cada Rama los pequeños grupos se agrupan en una sección y cada sección, según la edad, posee un consejo.
Esos consejos son el espacio en el cual se resuelven los conflictos nacidos del encuentro de los pequeños grupos en un mismo territorio (por ejemplo: el encuentro de las patrullas en la Unidad Scout o de los equipos en la Comunidad Caminante).
También hemos señalado que cuando no se alimentan de los pequeños grupos, las secciones entran en decadencia.
Así una vida rica en el pequeño grupo debe encontrar un equilibrio con el resto de la vida de grupo a nivel de sección.
En el libro "Patrullas y Consejos" ("Patrouilles et Conseils") Dominique Bénard define que la propuesta educativa del Movimiento Scout es una forma elaborada y estructurada del juego natural de los jóvenes. Idea que también expresa en otro libro muy conocido “Baden-Powell hoy”.
El Movimiento Scout les propone a los participantes constituir una sociedad de jóvenes acompañados por los adultos, una verdadera “república”, donde podrá desarrollarse el sentido cívico de los futuros ciudadanos.
Toda república es un esfuerzo de cooperación entre ciudadanos, más allá de los conflictos que los enfrentan. Los conflictos son naturales, el Movimiento Scout no los evita, lo novedoso es que recrea espacios para resolverlos a través de los Consejos de rama como lugar de encuentro de los intereses diversos de los pequeños grupos.
Toda república define el modo de vida de sus ciudadanos y el estilo de sus relaciones por la ley, norma que es elaborada en función de los principios fundamentales. En el caso del Movimiento Scout los Principios Fundamentales son los que rigen y ordenan todos los otros elementos que pivotan alrededor de ellos (Método Scout, Programa, etc.)
La propuesta educativa del Movimiento Scout es democrática, es decir formadora de ciudadanos, porque permite el aprendizaje del funcionamiento de las instituciones propias de una democracia participativa y, es a partir de la participación de los jóvenes en los organismos de gobierno de las unidades, que éstos internalizan la ciudadanía activa y las prácticas democráticas de participación en la toma de decisiones.
Estos elementos hilvanados (patrullas y consejos) no son opcionales y la falta o debilitamiento de alguno de ellos conspira contra el éxito de la propuesta pedagógica del Movimiento Scout.
En el programa educativo, a estas instituciones las llamamos órganos de gobierno de la rama.
El juego de los organismos de rama que interactúan es lo que da vida a los pequeños grupos y, a su vez, enriquece a la sección con el aporte de la diversidad de las diferentes patrullas y equipos. Conceptos como diversidad, convivencia, respeto, tolerancia se cultivan desde que los jóvenes ingresan al Movimiento Scout si estos dinamismos son aplicados de la forma correcta.
La misión de los órganos de gobierno no es negar el conflicto, sino lograr su resolución: los Consejos son el espacio que facilita la cooperación entre pequeños grupos y personas con objetivos distintos. Son también el espacio para escuchar opiniones diferentes, para ampliar la mirada, para ejercer la empatía y para, finalmente, resignar todos un poco en pos del bien del conjunto.
Por eso decimos que los Consejos son espacios progresivos de participación. Participación que crece de rama en rama según la edad de los jóvenes. Pero que también crece día a día según la madurez que van adquiriendo los jóvenes que participan de estos intercambios enriquecedores.
Es importante que los voluntarios adultos comprendamos que los jóvenes se inician en la dinámica de resolver conflictos en el pequeño grupo. No debemos ocultarles el conflicto, ni tampoco resolvérselo nosotros. Nuestro rol es de facilitadores para encauzar sus energías en respuestas positivas que les permitan a ellos resolverlos y, en ese proceso, aprender.
Luego, a medida que crecen, el grado de participación de los jóvenes se va ampliando hacia otros organismos, en los que tendrán la oportunidad de asumir diversos roles progresivamente más complejos. Hasta finalmente ejercer el voto joven o integrar alguno de los órganos de decisión institucional de la estructura de cada asociación scout.
Siempre listo, rodrigo
Rodrigo Gonzalez Cao

(Disclaimer: Participo del Movimiento Scout desde Lobato y he transitado por diferentes asociaciones scouts en mi vida. Por eso aclaro al lector desprevenido que los artículos publicados son escritos a partir de mi experiencia scout personal y, al menos conscientemente, no es mi intención realizar juicios de valor o sentencias que pontifiquen a unos y descalifiquen a otros. La intención al compartirlos es que puedan ser interpretados por cada uno de forma personal y adaptados a la realidad y contexto de cada lector según su propia experiencia y la situación particular de la asociación scout en la cual participa. Pido disculpas de antemano si involuntariamente alguno se siente incómodo con alguna de las lecturas).

Nota original, 25 de diciembre de 2010: https://scouts2012.blogspot.com/2010/12/los-organos-de-cada-rama-son-el-espacio.html

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