El rol educativo del Movimiento Scout ante el cambio de época

El rol educativo del Movimiento Scout ante el cambio de época

El telón de fondo del cambio de época son las transformaciones de hábitos sociales, culturales, familiares, de consumo, de alimentación (y tantos otros) que cuestionan o se contraponen a nuestra concepción antropológica y a la espiritualidad que le da sentido a nuestra existencia diaria.

Para sumarle complejidad, las juventudes enfrentan sus propios cambios en un entorno que no les da certezas de nada. Las juventudes transitan transformaciones de la escuela, el barrio, las redes sociales, los medios de comunicación y las culturas juveniles en una “Torre de Babel” que marea con su pluralidad de personas, lenguajes y tradiciones. 

Nosotros, como Scouts, ante el terremoto cultural que vivimos, frente a ese piso que se mueve, afirmamos los valores del Movimiento Scout para rescatar el significado de la fraternidad humana universal y construir un mundo mejor.

Y recordando la frase de Baden-Powell donde nos invita siempre a ver el lado bueno de las cosas, en este contexto de cambio epocal no consideramos que todo es blanco o negro. El Movimiento Scout invita a la descubierta de nuevos caminos, el diálogo y la construcción de puentes, reconociendo la posibilidad de diferentes respuestas por otros.

El cambio de época es un estado inacabado en constante movimiento, el rol del Movimiento Scout como fuerza juvenil que se caracteriza por la innovación es la construcción compartida junto a otros. Otros a los que reconoce como amigos y hermanos según lo expresa la Ley Scout.

Previamente señalamos que, en este cambio de época que transitamos, también se modifican las creencias y actitudes hacia la dimensión espiritual de las personas y, especialmente, de las juventudes ( https://scouts2012.blogspot.com/2021/06/las-creencias-religiosas-en-el-cambio.html ).

En dicha entrada repasábamos una cita de Baden-Powell que afirmaba que el deber para con Dios se cumple también a través del deber para con el prójimo al ayudar a otros, hacer buenas acciones diarias, desarrollar la autodisciplina y el altruismo, en definitiva, lo que B-P llama "formación del carácter". La formación del carácter, junto con el estudio correcto de la naturaleza, en la concepción original de Baden-Powell ayuda a las juventudes en su desarrollo espiritual.

La propuesta pedagógica del Movimiento Scout no se diluye en tendencias modernistas gnóstico-racionalistas, sino que impulsa el desarrollo espiritual y la vivencia de la propia fe de cada uno como elemento transversal e insustituible de su Programa de Jóvenes.

Las juventudes que protagonizan la propuesta educativa del Movimiento Scout son invitados a desarrollarse espiritualmente con un dinamismo de, al menos, tres momentos interconectados:

  • La adhesión a una creencia religiosa por medio de una fe.
  • La participación en su comunidad particular de fe a partir de la celebración y acción concreta cotidiana (ritos y celebraciones).
  • La experiencia de la vida conforme una concepción antropológica y una espiritualidad que dan sentido a las opciones cotidianas. 
La vivencia de estos valores se proyecta a la sociedad mediante el testimonio personal y la participación en las instituciones.

De todos estos momentos interconectados, el tercer elemento, al que llamamos la “experiencia de la vida” es el más afectado por el cambio de época que hemos descrito previamente y puede encontrar cortocircuitos con nuestra concepción antropológica y nuestra espiritualidad.

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Siempre listo, rodrigo

Rodrigo González Cao

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Disclaimer - Descargo de responsabilidad: Los puntos de vista y opiniones expresados en esta publicación son de exclusiva responsabilidad del autor y no reflejan necesariamente la opinión oficial de ninguna asociación scout. Para evitar malentendidos aclaro, en consecuencia, que actualmente no estoy afiliado a ninguna asociación scout puntual y las ideas que expreso solamente me representan a mí, no intentando arrogarme la representación de nadie más. Comencé a participar del Movimiento Scout desde que era Lobato con 10 años y en este tiempo he transitado por diferentes asociaciones scouts. Hoy tengo 50 y trato de compartir mi visión e intercambiar respetuosamente pareceres con quienes quieran hacerlo en buenos términos y sin hablar despectivamente del otro. Por eso aclaro al lector desprevenido que las opiniones publicadas son escritas a partir de mi experiencia scout personal y, al menos conscientemente, no es mi intención realizar juicios de valor o sentencias que pontifiquen a unos y descalifiquen a otros. Agradeciendo recíprocamente la misma intencionalidad de todo aquel que desee iniciar un intercambio de ideas sobre ellos, los invito a expresarse con el mismo en los comentarios habilitados en las redes sociales en las cuales participo. La intención al compartir estas ideas es que puedan ser interpretadas por cada uno de forma personal y adaptadas a la realidad y contexto de cada lector según su propia experiencia y la situación particular de la asociación scout en la cual participa. Pido disculpas de antemano si involuntariamente alguno se siente incómodo con alguna de las lecturas, sepa que no ha sido mi intención incomodar a nadie.

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